lunes, 25 de julio de 2016

'Uno de mis hijos' de Anna Katharine Green

¡Hoy toca una de misterio! En este caso de la mano de una autora que conocí gracias a la editorial dÉpoca y su 'El misterio de Gramercy Park'. Disfruté mucho con aquella intriga y el estupendo personaje de intrépida y decidida, Amelia Butterworth y esta vez Anna K. Green ha vuelto a conquistarme.

En 'Uno de mis hijos' volvemos a adentrarnos en la casa de una familia adinerada de Nueva York. Allí por casualidad recala Arthur Outhwaite cuando, mientras pasea por la calle, una niña reclama su ayuda porque algo le sucede a su abuelo, que no es otro que el poderoso financiero Archibald Gillespie. Poco puede hacer ya por él cuando llega a su encuentro, pero su presencia allí hará que se vea inmerso en la trama de su sospechosa muerte que apunta directamente como culpables a uno de sus tres hijos.

Si os gusta el misterio clásico, como a mí, esta es sin duda vuestra autora. ¡No por nada la llaman la madre de la novela de detectives! Y es que sus historias, y 'Uno de mis hijos' es así, tienen todos los elementos para engancharte irremediablemente: secretos, intereses encontrados, pistas falsas, revelaciones sorprendentes, un poco de romance...

Helen Allingham
A todo esto se unen los cambios de escenarios que a mí siempre me gustan mucho y que nos hacen ir de los barrios más lujosos a los bajos fondos de la ciudad, los interrogatorios que ponen contra las cuerdas a todos los personajes y también a los lectores para hacernos dudar de todos y cambiar de opinión sin parar, alguna historia del pasado que te anima a que te pongas de lado de uno u otro...

Recursos que logran que vivas el misterio junto con los protagonistas y te metas de lleno en este suspense familiar, en el que hay que estar muy atento a todos sus miembros. Algunos de ellos tiene cosas importantes que revelar y otras tantas también que ocultar y en ese sentido son como fichas de dominó puestas en fila en las que una afecta a la otra y la puede sostener o hacer tambalearse.

Así esta novela es más coral, sin una personalidad tan potente como la de Amelia y que no dejaba indiferente, y con trama muy bien desarrollada en la que casi lo de menos es el asesinato en sí del desafortunado señor Gillespie.

James Carroll Beckwith
Y es que todo el trasfondo familiar que lo rodea es muy interesante con esos hijos que han supuesto una gran decepción para su padre y ahora se quitan, o no, un peso de encima o la prima Meredith, objeto de enamoramiento de más de un personaje que también tiene mucho que decir.

Un argumento muy bien narrado con un estilo que no es para nada farragoso, que es en lo que caen a veces las novelas de misterio para liar al lector. En este caso es todo lo contrario, no se anda con rodeos a la hora de contar la historia y su buen ritmo hace que incluso momentos en los que tiene que pararse a detallar más datos, como por ejemplo los interrogatorios o las conversaciones entre detectives, no se hagan en absoluto pesados y los leas con ganas de descubrir cualquier pista que te pueda ayudar a solucionar el caso.

Por momentos, en algunos giros, me recordaba a Wilkie Collins (debilidad absoluta por él), contemporáneo y admirador suyo. Así que si Wilkie le da su bendición, ¿qué más se puede pedir? Solo queda disfruta de esta novela tan entretenida que me han hecho estar aún más encantada de haber conocido a Anna K. Green y desear leer más cosas suyas. 

martes, 5 de julio de 2016

'Las cuatro gracias' de D. E. Stevenson

Con la señorita Buncle tuve un auténtico flechazo :-D, podría incluirla entre los personajes literarios que mejor me han caído de todos los que he conocido a lo largo de estos años lectores. D. E. Stevenson me conquistó también con su modo de narrar y con ese ambiente tan de "buen rollo" que se vive en sus historias. Así que en cuanto vi que Rara Avis había editado un nuevo libro suyo, ¡ni lo dudé! 

En esta ocasión mi querida señorita Buncle da el relevo a las cuatro hijas del vicario de Chevis Green, el señor Grace: Liz, Sal, Tilly y Addie, muy diferentes entre sí por lo que cada una deberá enfrentarse a nuevas situaciones y personajes que pondrán patas arriba su apacible vida. 

"Dicen muchas tonterías y alguna cosa sensata; a veces discrepan acaloradamente unas de otras o se tratan con extrema insolencia, pero también son fieles entre ellas a carta cabal y forman un frente muy unido contra el mundo exterior" 

Así describe la autora a las cuatro Gracias que dan título a este libro y cualquiera de los que estéis leyendo estas líneas y tengáis hermanos os sentiréis identificados: se pelea, te vuelven loco, pero son tus compañeros inseparables a los que quieres por encima de todo.

Cezanne
Y esto es lo que nos encontramos en este libro: el día a día de cuatro hermanas que trabajan, cuidan de su padre, organizan la casa, se relacionan con sus vecinos, hacen nuevas amistades, se divierten...

No es un novela de grandes revelaciones o sorpresas sino que describe lo cotidiano y ese es su gran mérito, porque lo hace de un modo tan ameno y con sentido del humor que podrías estar páginas y páginas leyendo las peripecias de las hermanas Grace.

Además, como me sucede siempre que leo un libro de esta autora, me entran hasta ganas de vivir dentro de él como si fuese un personaje más. Seguro que me comprendéis: cuando la ambientación de una historia te transmite una sensación apacible, los personajes te resultan simpáticos, te deja con una sonrisa... Me pasa lo mismo por ejemplo con 'Crandford' de Elizabeth Gaskell.

Pero no todo es calma y tranquilidad para las hermanas Grace, un poco de vidilla siempre viene bien y ellas también la van a tener. En este caso viene de personas muy diferentes que son el contrapunto perfecto para nuestras protagonistas y que las vuelven un poco del revés.

Thomas Roland Rathmell
Así van a aparecer en su apacible existencia un apuesto capitán que las rondará del modo más descarado, un arqueólogo un poco torpón que conquistará a todas aunque no del mismo modo, un vecindario con un punto original (¡no puede faltar!) y, mi favorito, un huracán llamado tía Rona. Este personaje es genial porque es la típica señora que revoluciona hasta el más tranquilo, todo lo enreda y lo complica y parece que aun te está haciendo un favor. Da momentos realmente divertidos y de muchas risas.

Y es que como dice la autora en el prólogo: "una pizca de humor no está fuera de lugar ni en las ocasiones más serias y solemnes" y esto es lo que encontramos en 'Las cuatro gracias': una historia sin complicaciones, con humor, entretenida y que hace pasar un estupendo rato de lectura. Así que... ¡ a por ella! Yo ya estoy deseando que caiga en mis manos más historias de D. E. Stevenson.