'Harriet' de Elizabeth Jenkins

Harriet siempre ha estado protegida por su familia debido a su naturaleza demasiado cándida y mentalidad absolutamente infantil, a pesar de estar ya en la treintena. En una visita a unos parientes conoce a Lewis, un hombre sin escrúpulos que solo quiere aprovecharse de su fortuna.En ese momento comenzarán los problemas para ella.

Debo decir que esta novela me ha enganchado, apasionado y estremecido por igual. Es una historia que te atrapara irremediablemente y que está basada en hechos reales. Aunque no importa si antes de leer el libro ya se conocen los detalles, porque el valor de esta novela no solo reside en los hechos que cuenta, sino en lo maravillosamente bien que está escrita. ¡No puedes dejar de leer!

La autora coge la realidad, la versión que ella siempre consideró cierta del llamado "misterio de Penge" que sobrecogió a la sociedad de aquel entonces (corría el año 1877), y la novela; recreando diálogos, situaciones, sentimientos,... que hace que te metas de lleno en la historia y que la vivas.

Tanto lo hice que por momentos llegué a pasarlo realmente mal, porque en mi opinión el centro del relato es la crueldad dentro de lo cotidiano. Como al lado de una realidad atroz, quienes la provocan, y ejercen contra una persona indefensa, pueden llevar un día a día perfectamente normal y encantados de la vida.

Y es ahí donde está lo más espeluznante de lo trama, un argumento que en manos de otro escritor podría haber sido como una mala peli de misterio, en la que todo es tan evidente que más que dar susto, se ve todo demasiado forzado y no funciona. Pero no, Elizabeth Jenkins sabe cómo hacer las cosas y no se precipita, sino que detalle a detalle va logrando aumentar la tensión y la sensación de angustia.

En ese sentido, tampoco es nada obvia; no nos describe sin más un hecho que te deja pasmado, sino que utiliza como recurso un comentario de un personaje, un dato escrito como de pasada, un pensamiento,...

Algo que puede parecer una nimiedad en el momento pero que, al contrario, nos van desvelando el espanto que se esconde detrás y lo que significa, hasta que todo se desvelando y se confirman nuestras peores sensaciones.

La caracterización de los personajes también es estupenda. La madre de Harriet, la única que está fuera del enredo y que sirve para reforzar aún más ese sentimiento de agobio; Harriet, inocente como una niña sin ser capaz de reparar en todo lo que se trama a su alrededor; Lewis, tan aprovechado, manipulador y sin escrúpulos como su hermano Patrick; la egoísta y maliciosa, Alice o Elizabeth, siempre justificándose.

La autora sabe cómo describirlos que enseguida sepamos qué clase de personas son sin necesidad de extenderse demasiado, solo con los trazos que nos ofrece de sus respectivas personalidades.


Veréis, cuando leáis el libro (ya lo doy por hecho :-D), las perlas que salen de la boca de algunos de ellos y compartiréis mis ganas de entrar en la novela y no responder de mí misma.

Tras todo el desarrollo, el desenlace es más rápido pero me parece una buena decisión hacerlo así porque lo importante es todo lo anterior, cómo se han ido produciendo los hechos que nos ocupan y cómo hemos llegado hasta ahí; esa parte es la que merece que la narración sea más pausada. Mientras que el punto final, está bien contado pero centrándose en lo esencial sin alargarse inncesariamente de más. Además, el libro se remata con un fantástico epílogo, escrito por una periodista actual no por la autora, que explica cómo se fraguó la escritura de 'Harriet' con datos, detalles significativos y anécdotas muy interesantes.

Así que... ¡¡¡tenéis que leer este libro!!! De verdad, está muy, muy bien. No es una lectura fácil, como os decía yo lo he llegado a pasar muy pachucho por cómo describe los sucesos e imaginándome todo aquello; pero merece la pena leerlo. Tanto por las enseñanzas que deja, porque es increíble lo que somos capaces de hacer los seres humanos y de qué modo; como por su valor literario. Dadle una oportunidad, nos vais a arrepentir.