'Al este del Edén' de John Steinbeck

Llegué a este libro gracias a la película que protagonizaba mi adorado James Dean (soy fan muy fan) y que os recomiendo muchísimo. Es una peli maravillosa y la historia me gustó tanto que tenía que ir a por la novela, más aún sabiendo que su autor era el gran Steinbeck.

Así que hace ya unos cuantos años, tantos como más de diez, la leí por primera vez y me caló de tal manera que me apetecía muchísimo una relectura con más experiencia lectora. Os confieso que nuevamente devoré cada una de sus páginas, creo que incluso más que la primera vez.

El autor nos lleva a su tierra de origen, el valle de Salinas en California. Las diferentes generaciones de la familia Hamilton y Trask nos ayudarán a descubrir cómo va cambiando el país en los inicios del siglo XX. Especialmente nos veremos inmersos en las vivencias a las que deberán enfrentarse los personajes, en especial Adam Trask y sus hijos, Aaron y Caleb.

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Quisiera ser capaz de transmitiros en esta reseña lo increíble e imprescindible que es este libro. En él están todos los matices que tenemos los complejos y contradictorios seres humanos, lo más grandioso y lo más miserable que podemos llegar a ser, nuestros mejores y peores sentimientos e impulsos.

Incluso el gran dilema si podemos rebelarnos contra lo que se espera de nosotros o creemos que debemos ser y demostrar a todos, incluido uno mismo, que nada es inamovible. Es un retrato del alma humana tan certero que deja mucho poso.

Uno de los personajes más inolvidables para mí es el de Cathy. Ella es la maldad sin paleativos. Pero no de esos malos estereotipados que no te convencen porque al final casi son una caricatura sin sentido. No, ella es maquiavélica, mezquina, cruel, dañina... todos los adjetivos horripilantes que le queramos poner y al mismo tiempo es sutil, paciente, inteligente...

El fin, sus motivaciones, justifica para ella todos los medios que hagan falta sin que le tiemble el pulso. Aunque también tiene sus debilidades... Es uno de los personajes más odiosos y despreciables sobre los que he podido leer y al mismo tiempo está tan bien descrito que logra engañarte por momentos. Te manipula, tal y como lo hace con el resto de personajes, aunque nosotros sepamos mucho más cosas.

Enfrente tiene a un fascinado Adam al que incluso, en ocasiones, podemos ver como demasiado indolente. Pero Adam, a diferencia de su mujer, siente y padece, se deja llevar por su corazón, comete errores, necesita afecto...

Edward Hopper

Y de una pareja tan dispar nacen unos mellizos que parecen ser, de alguna manera, el reflejo de sus padres aunque sin saberlo: uno querido, que gusta a todo el mundo y otro lleno de recelos y que no se cree ni objeto, ni merecedor, del amor de nadie. Piensa que algo, sin saber exactamente qué, anda mal dentro de él y que debe resignarse a esa naturaleza, a esa forma de ser.

Pero las diferentes pruebas que irán apareciendo van a demostrar que no todo está escrito, que tenemos mucha capacidad de decisión para optar por lo que queremos ser. Creo que esa es la clave de un final que impresiona de porque tiene una fuerza... de lo puro triste, esperanzador, dramático..., todo en uno, que es.

Hay mucho más en este libro: el grandísimo Lee, el soñador y bondadoso Samuel Hamilton, el maravilloso modo de narrar de Steinbeck, las interesantes historias de personajes más secundarios... Y todas ellas son solo algunas de las cosas que más me han llegado a mí, porque Al este del Edén este es un libro tan redondo, tan lleno de matices, que cada lector sacará de él mil y una lecciones, no importa las veces que se lea. Ofrece tanto que nunca se agota. Doy fe.

No puedo evitar recomendaros también la película de Elia Kazan. Es una adaptación excelente que logra, con los cambios que exige el cine, mantener la esencia de la novela y darnos momentos memorables. No dejéis escapar ninguna de las dos. Estoy segura de que os fascinarán tanto como a mí.